martes, 29 de septiembre de 2009

Tiendas de Auto-servicio golpean la dieta del consumidor

Una comparación de precios al consumidor en establecimientos de Wal-Mart, Costco (Comercial Mexicana) y un mercado sobre ruedas reportó incrementos en las cadenas de autoservicio de 30 a 42% en el área de frutas y verduras. Compare usted:


  Comercial Mexicana Wal-Mart Mercado sobre ruedas
Calabaza  13.50  19.40    7.00
Jitomate saladet  12.90  10.40    6.00
Cebolla blanca  19.90  19.00  10.00
Lechuga romana    9.90  12.50    8.00
Betabel    9.60    7.80    8.00
Zanahoria    9.20    8.50  12.00
Papa  13.40    9.90    7.00
Pepino    6.90    7.50    6.00
Papaya  13.50  17.30  12.00
Plátano    6.20    8.80    5.00
Manzana golden  22.90  25.90  20.00
Uva verde  24.00  23.00  20.00
Sandía    5.90    9.90    6.00
Mandarina    3.90    7.90    5.00
Total 152.00 187.80 132.00
  30% más 42% más  

Estos datos los obtuvo El Poder del Consumidor en tres puntos del sur de la Ciudad de México: Superama (Wal-Mart) de Tlalpan y Periférico, Comercial Mexicana (Costco) de Miguel Ángel de Quevedo y el mercado sobre ruedas sabatino de Av. Aztecas.

“No hay duda de que el aumento de precios en los alimentos está siendo utilizado por las grandes cadenas de supermercados para especular con los precios”, señaló Alejandro Calvillo, director de El Poder del Consumidor.

En México, el consumo de frutas y verduras cayó 30% en un periodo de 14 años (1988-2002), al tiempo que aumentó el consumo de productos con altos contenidos de harinas refinadas, azúcares, grasas y sal. Esta tendencia se agudiza con el aumento de precios de los alimentos, lo cual también es aprovechado por las cadenas de comida rápida (McDonald’s, Burger King y KFC) que ofrecen paquetes “económicos”. Esta situación contribuye a agudizar la epidemia de sobrepeso y obesidad que sufre la población mexicana, la segunda a escala mundial y la que presentó el más rápido crecimiento en la última década.

Por ello, es necesario desarrollar una campaña pública de orientación nutricional, controlar la publicidad de comida chatarra dirigida a niños y regular los alimentos y bebidas en las escuelas.

El siguiente link avala que la PROFECO confirma los datos de la nota anterior:

http://www.jornada.unam.mx/2008/11/02/index.php?section=economia&article=024n1eco

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